PÍDOLA



 Ilustración cedida por Enrique Arroyo Berrones

 

Juan J. de la Rosa Sánchez

Profesor Honorario de la Universidad de León

 

“La estrella es botón de ancla

en grumetes y en arcángeles,

y un delfín salta a piola

sobre el torso del levante.”

(Fragmento del Romance de la novia del

Guardiamarina. Adriano del Valle)

 

Juego de saltar sobre uno que está agachado. El salto se realiza con carrera de impulso, batiendo con los dos o con un pie en un lugar determinado (normalmente una raya) y apoyando las manos, el saltador, en la espalda del que está agachado. La distancia desde la raya al burro puede ser fija o variable, según modalidades.

Goya tiene colgado un lienzo, en el Museo de Bellas Artes de Valencia, en el que se representa el juego con esta secuencia: batida, salto con apoyo de manos y piernas abiertas, caída de uno de los saltadores y la queja de otro que, por haberse caído, se ha hecho daño al parecer.

¡Vamos a jugar a la piola! decíamos por los años 40 y 50 del pasado siglo XX en Jerez y en Ayamonte en el que las calles eran lugares para pasear y jugar. Enseguida había acuerdo para seleccionar la modalidad, concertar el reglamento y sortear quién tenía que hacer de burro, es decir, quién ponía. Recuerdo cuatro formas de realizarlo: a) salta uno a todos los demás agachados; b) saltan todos a uno agachado; c) todos saltan y se agachan, y, d) por equipos, uno de ellos salta y el otro se agacha.

Hasta no hace mucho tiempo era cosa corriente verlo jugar en las calles. Ahora es más difícil, debe ser porque no hay sitio nada más que para los coches. Los padres que quieren que sus hijos estén coordinados y sean fuertes y veloces los mandan a un gimnasio, donde siguen sujetos a un horario y a una metodología que, en muchos casos, les impide o dificulta desarrollar su creatividad y hacer uso de su libertad y de su autonomía. El juego es ante todo y sobre todo libertad de acción y de elección: ¿jugamos?, ¿a qué jugamos?

REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA

Castro Guisasola lo llama ‘el nache’ y también ‘el macho’, ‘el agache’, ‘el burro del salto’ y ‘la mesa’. Alcalá (1924) lo intitula ‘pídola’ y ‘quirri’. Matute (1970) en: Algunos muchachos y otros cuentos de su obra El Rey, dice de este juego que es ‘la burranca’. Valserra (1944) afirma que entre los juegos del futuro caballero de la Edad Media se encontraba ‘el saltacarnero’. Como ‘salto del carnero’ lo trae Chateau (1958) y dice de él: ‘Juego que tiene diversas variedades y diferentes nombres según las regiones: ‘paso’ en Madrid, ‘rango’ en Buenos Aires, etc.’ También se le conoce como: ‘salta-cabrillas’, ‘ídem’ y ‘dólar’. Juan de la Plata (2002) describe un juego de pídola de niñas que denomina “enclara” o “enclaras”. En El Mentor de la Infancia (1843) se le nombra como ‘el salto de la mula’, ‘fil derecho’ y ‘pasage’. La Real Academia Española, en su Diccionario de Autoridades lo registra como ‘fil derecho’. Dicha Academia, no recoge la voz pídola hasta el Diccionario de 1970 y lo hace así: “Juego de muchachos que consiste en saltar por encima de uno encorvado.” La misma edición lo registra también como ‘dola’. La edición de 1985 cambia un poco la redacción y dice: “Juego de muchachos que consiste en ir saltando varios por encima de otro encorvado.” En 1989 hay otra pequeña variación: “Juego de muchachos que consiste en ir saltando por encima de otro encorvado.” Las siguientes ediciones lo definen de forma similar. Caro (1694) lo cita entre los juegos de salto. Sus antecedentes los vislumbra en Ateneo, libro I, capítulo 18 y manifiesta que, le parece que, Policiano "aludió también a él en el prólogo de los Menecmos..."

MODALIDADES

A LA PRIMERA LO QUE SE QUIERA

A la primera

lo que se quiera.

A la segunda, culá que te hunda.

A la tercera, rodilla en tierra.

A la cuarta culá que te parta.

A la quinta, el “lique”.

A la sexta, coscurros a la cesta.

A las siete coge la cesta y vete.

A las ocho, bizcocho.

A la nueve deja la cesta y vuelve.

A las diez, “polique” inglés

para echar a correr.

 

A LA UNA ANDA LA MULA

Uno de los jugadores se agacha y los demás saltan por encima de él haciendo lo que dice la frase que les corresponde, de las siguientes:

A la una anda la mula.

A las dos mi mula me dio una coz.

A las tres Pepito, Manolito y Andrés.

A las cuatro un buen salto.

A las cinco, te la  hinco, con un buen brinco.

A las seis la recua.

A las siete salto y planto mi capiruchete.

A las ocho salto y lo recojo.

A las nueve empina la bota y bebe.

A las diez otra vez.

A las once llama el conde.

A las doce le responden: tran, quién.

A las trece ya amanece.

A las catorce ya es de noche.

A las quince el caballo relinche.

A la dieciséis era el conde la rondera,

le mandaron desollar una perra,

la perra era de pino,

muerta la llevan en un pepino,

el pepino era de aceite.

muerta la llevan para San Vicente.

San Vicente estaba cerrado,

muerta la llevan para el mercado.

El mercado estaba abierto,

la agarraron por las patas,

la llevaron a ese huerto.

            (El que falle frase o salto será el que ponga).

            Variante de este a la una anda la mula es la siguiente:

A la una anda la mula.

A las dos el reloj.

A las tres el trespiés (sic)

A las cuatro vino blanco.

A las cinco vino tinto.

A las seis los gochos y los bueyes.

A las siete planto mi capiruchete.

A las ocho cojo mi mocho.

A las nueve saca la bota y bebe.

A las diez vuelve a beber.

A las once llama el conde.

A las doce le responde.

A las trece amanece.

A las catorce es de día.

A las quince alegría.

            Otra variante:

A la una anda la mula.

A las dos anda el reloj.

A las tres los martillicos de San Andrés.

A las cuatro el buen salto.

A las cinco el buen brinco.

A las seis el almirez.

A las siete salto y pongo el carrapuchete.

A las ocho salto y cojo mi trigo mocho.

A las nueve le respondo.

A las diez lo vuelvo a coger.

A las once llama el conde.

A las doce le responde.

A las trece amanece.

A las catorce ya es de noche.

A las quince llevan las cañas a León.

Las cañas eran de Holanda.

Muerto lo llevan en unas andas.

Las andas eran de pino.

Muerto lo llevan en un pepino.

El pepino era de a cuarto.

Muerto lo llevan en un zapato.

El zapato era de un viejo.

Muerto lo llevan en un pellejo.

El pellejo era de aceite.

Muerto lo llevan a San Vicente.

San Vicente estaba cerrado.

San Pelayo estaba abierto.

San Pelayo abre la olla y lo mete dentro.

            Otra variante:

A la una anda la mula.

A las dos anda el reloj.

A las tres los martillicos de San Andrés

(Al saltar deben dar una patada en el trasero del que pone).

A las cuatro el buen salto

(Todos deben adoptar, al caer, la misma postura que el primero).

A las cinco el buen brinco.

A las seis el almirez.

A las siete salto y pongo el carrapuchete.

(Al saltar poner una boina o un pañuelo)

A las ocho salto y cojo mi trigo mocho

(Se recoge el pañuelo o boina)

A las nueve le respondo.

A las diez lo vuelvo a coger.

A las once llama el Conde.

A las doce le responde.

A las trece amanece.

A las catorce ya es de noche.

A las quince llevan las cañas a León.

Las cañas eran de Holanda.

Muerto lo llevan en unas andas.

Las andas eran de pino.

Muerto lo llevan en un pepino.

El pepino era de a cuarto.

Muerto lo llevan en un zapato.

El zapato era de un viejo.

Muerto lo llevan en un pellejo.

El pellejo era de aceite.

Muerto lo llevan a San Vicente.

San Vicente estaba cerrado.

San Pelayo estaba abierto.

San Pelayo abre la olla y lo mete dentro.

            Celaya (1981) recopiló ésta:

A la una, anda la mula.

A las dos, tira una coz.

A las tres, tira otra vez.

A las cuatro, pega un salto.

A las cinco, pega un brinco.

A las seis, salto como veis.

A las siete, salta pronto y vete.

A las ocho, Jerez y bizcocho.

A las nueve, nadie se mueve.

A las diez, salta otra vez.

 

LAS HORAS DEL RELOJ

A la una, dar agua a la mula.

A las dos, le dio la coz.

A las tres, los tres borriquitos de San Andrés.:

Pedro, Juan y Andrés.

A las cuatro, brinco y salto.

A las seis, machaca la vieja los ajos en el almirez.

Machácalos bien que son para comer.

Machácalos mal que son para cenar.

A las doce estarán ¿sí? o ¿no?

(si el que pone contesta afirmativamente, el juego continúa, pero si la contestación es negativa, el que salta, debe repetir toda la coplilla desde las seis sin equivocarse, pues si así ocurre pondrá él)

A las siete planto mi garapuchete.

A las ocho lo recojo con mis dientes de corcho.

A las nueve, quiere parir la perra y no puede.

A las diez, paridita es.

A las once, llama el conde con campanillas de bronce.

A las doce le responde:

¿Qué quiere usted, señor Conde?

¿Azote arremanquillé, liqué o culá?

A las trece, la rastrerilla amanece.

A las catorce en un cofre.

A las quince, tilín, tilín.

A las dieciséis, cabezota de buey.

A las diecisiete el salto de los billetes.

A las dieciocho, lío, lío

(Al caer, lo debe hacer sobre una sola pierna y mover los brazos simulando que está devanando una madeja)

A las diecinueve, empina la bota y bebe.

A las veinte, el escribiente.

A las veintiuna, lique de Madrid a La Coruña.

A las veintidós, lique de Madrid a Badajoz.

A las veintitrés, lique de Madrid a Santander.

A las veinticuatro, corre que te pilla el gato.

Rodríguez Marín (1882) reproduce varias rimas para la comba, de este a la una anda la mula.

 

EL SALTO DE LA MULA

Con esta denominación y como ‘fil derecho’ y ‘pasage’ lo trae El Mentor de la Infancia (1843) y dice que se juega así:

“Reunidos una porción de niños... empiezan por sacar a la suerte el primero que ha de hacer de mula, que se coloca a cierta distancia con el cuerpo doblado apoyándose con las manos sobre sus rodillas...Todos los niños van saltando unos en pos de otros, y colocándose a igual distancia los que saltan primero para que tengan que multiplicar sus saltos los que vienen detrás. El que tropieza o cae hace de mula si se repite el juego. Durante la carrera y saltos van los niños diciendo:

A la una anda la mula;

a las dos tira la coz

(En efecto suele tirarla el que hace de mula, si es travieso para que caiga el que salta)

a las tres vuelve otra vez;

a la cuatro da el salto;

a las cinco el brinco;

a las seis por el rey;

a las siete capiruchete;

a las ocho pan y bizcocho;

a las nueve lleva la burra y bebe;

a las diez otra vez;

a las once hombre de bronce;

a las doce acabose.

Entonces si todos han saltado limpio, gritan unos ¡fil derecho! y los otros responden ¡ó que bien hecho! y se echan de nuevo suerte para volver a empezar el juego.”

 

LA CIGÜEÑA.

Por equipos: unos se agachan, los otros saltan hasta que pierde alguno. Tiene una variante registrada como chorromorro (aunque este es otro juego), en la que los jugadores cantan para sortear quién pone:

Chorromorro,

píquili,

reina

unos ponen

y otros saltan.

 

CENTINELA ALERTA

El que salta dice: ¡Centinela alerta!  y el que ha saltado antes que éste responde: ¡Alerta está para el que venga! Los que lo habían hecho con anterioridad deben permanecer, en la misma posición en la que cayeron, sólo pueden moverse durante el salto del centinela para cambiar de posición e intentar pisar a otros y evitar que no lo pisen. Si se mueven antes o después del salto, ponen.

 

EL CORRECALLES

Todos agachados excepto uno que salta y mientras lo hace debe decir:

A la una salta la mula,

a las dos el reloj,

a las tres san Andrés,

a las cuatro san Pelayo,

a las cinco san Francisco,

a las seis comeréis,

a las siete un brochete,

a las ocho un bizcocho,

a las nueve echa la burra a beber,

a las diez échala  otra vez,

a las once llama el conde,

a las doce no responde.

Variante del correcalles. A medida que van saltando se van colocando en la determinada posición para que los demás vayan saltándolo. De tal manera que todos saltan a todos.

Otra modalidad consiste en que el niño que pone se coloca en el interior de un círculo y va diciendo lo que los demás, al saltar deben hacer:

A la primera no te toco.

(Deben saltar sin tocarle)

A la segunda bumba.

(Saltar dejándose caer sobre la espalda del que pone)

A la tercera mariquita la rodillera.

(El que salta se agarra al de abajo de tal manera que le obliga a caer)

A la cuarta quedar sentado.

(Debe quedar sentado y se puede agarrar a la ropa del de abajo, pero si éste dice fuera estribos el jinete debe levantar las manos y quedarse en equilibrio, sin caerse).

A la quinta un pelín

(Al saltar se le da un espolique al que pone).

 

EL MIDE

Se marca una línea en el suelo y el que pone se coloca a uno de los lados de la misma para que todos los compañeros salten por encima de él. Una vez finalizada esta primera vuelta y en cada vuelta de las siguientes, el último que saltó dice los pasos que ha de correr el burro hacia delante (un paso equivale a un pie cruzado seguido de otro normal). A partir de ahí, el primero tiene que saltar apoyando un pie entre la línea y el burro (elige con qué pie salta y los demás deben hacerlo igual. Si alguno cambia de pie, pierde y pone, pasando el burro a saltar el último). Si el primero apoya un pie y alguno de los que le siguen realiza el salto sin apoyo pasa a ser éste el primero a la vez siguiente. Hasta seis pasos se pueden meter dos pies o una “zapatera”, que puede ser abierta (caer con los pies separados) o cerrada (caer con los pies juntos). Hasta nueve pasos se pueden meter tres pies, una “zapatera” y un pie o un “gelimbrú· (salto con los pies cruzados) puede ser de derecha o de izquierda y según aumentan los pasos aumentan las combinaciones de pies, “zapateras” y “gelimbrús”.

 

EL TROTAMUNDOS

El primero se agacha y es saltado por el segundo, que se agacha, para que el tercero salte a aquél y a éste y así, sucesivamente, de tal manera que se establezca una cadena sin fin en la que todos saltan y ponen.

 

EL UNO

Se marca una línea en el suelo y junto a ella se coloca el que pone. El resto se sitúan en hilera numerándose del 1 en adelante. El primer salto lo realizan estando el burro pegado a la raya. El último número indica, al saltar, la distancia a la que debe colocarse, para la próxima vuelta el burro y se repite toda la ronda, empezando por el nº 1 que tiene que decir en ese momento el número de zancadas que se compromete a dar para efectuar el salto y así sucesivamente. El jugador que consiga saltar con el menor número de pasos será el número uno para la ronda siguiente, el dos el que le siga en paso y así lo harán el 2, 3, etc. Se pierde por realizar más pasos que los anunciados, derribar al burro, golpearlo y pisar la raya.

 

MAZACULO

Todo ocurre igual que en el juego anterior. En la primera vuelta, al saltar, se dice picada y se da una patada en el trasero de los encorvados. En la segunda se dice mazada y se roza, con el culo, por la espalda de los que ponen. En la tercera dice el saltador más recalcada y se sienta, un momento, sobre la espalda del de abajo. Pierde el que no dice o no hace lo que le corresponda o falla en el salto.

 

PASOS

El que pone se agacha junto a una raya trazada en el suelo y conforme van saltando los demás jugadores dice:

Pasos, sopas

la primera sin tocar,

la segunda tente burra,

la tercera jabonera y amarilla,

la cuarta una palmadita y ¡basta!

la quinta no resistas,

la sexta no te caigas,

la séptima el espolique

(Se le da una patada en el culo al que pone)

Cada ronda siguiente se va alejando el burro de la raya midiendo un pie, de modo que cada vez resulta más difícil saltar sin pisar la raya. El que pisa la raya o el que no salta, la liga y el juego comienza de nuevo.

 

SALTA LA CABRILLA

Al saltar, cada uno recita un verso y hace lo que éste dice:

A la una, la mula

(Dice el primero).

A las dos, la coz

(Al saltar, el segundo, da una patada).

A las tres, los saltitos de San Andrés

(Da tres saltos).

A las cuatro brinco y salto.

A las cinco salto y brinco.

A las seis salto del revés

(Gira durante el salto).

A las siete planto mi caperucete

(Deja un pañuelo u otro objeto).

A las ocho lo recojo.

A las nueve alza la bota y bebe

(Simula beber).

A las diez alzo la bota otra vez

(Bebe dos veces).

A las once llamo al Conde

(Da una palmada).

A las doce me responde

(Da dos palmadas).

A continuación, el que pone, dice:

El Conde de Inglaterra

mandó descollar una perra

con un cuchillo de caña.

En el monte hay un pino,

en el pino un huevo,

en el huevo un pelo;

tirando de ese pelito

salen dos pajaritos.

¡Pum, pum! Que tiran ¡a huir!

(Salen todos huyendo perseguidos por el que ponía. El apresado pagará al comenzar de nuevo el juego).

 

SAN VICENTE DE LA BARQUERA

En Gradefes (León), la copla era la siguiente:

San Vicente de la Barquera,

muerto lo llevan en una pera,

la pera era de invierno,

muerto lo llevan en un pellejo,

el pellejo era de aceite,

muerto lo llevan a San Vicente.

(El primer saltador no golpea. A partir del segundo se le dan tantos golpes al agachado como el número que ocupe el verso en la estrofa. Quien falle salto, frase o golpes, pondrá la próxima vez).

GLOSARIO

a la una salta la mula. Modalidad del juego.

a saltillos. “Lo mismo que a saltos.” (DRAE, 1803).

a saltos. “Modo adverbial. Lo mismo que dando saltos o saltando de una cosa a otra, dejándose u omitiendo las que están en medio.” (DRAE, 1803).

agache (el). Denominación (Castro Guisasola,1985) 

alzadera. “Especie de contrapeso que servía para saltar.” (DRAE H, 1933).

burranca (la). Denominación (Matute,1970).

burro del salto (el). Denominación (Castro Guisasola,1985)

burro. 1. El jugador que pone. 2. Modalidad del juego.

candaje. Modalidad del juego.

centinela alerta. Modalidad del juego.

cigüeña. Modalidad del juego.

correcalles. Modalidad del juego.

cruja. Modalidad del juego.

culá. Al saltar no hacerlo limpiamente sino dejarse caer para darle una culada al burro.

dalotra. Modalidad del juego.

dola. En el lenguaje infantil, pídola.” (DRAE, 1970).

dólar. Denominación (Chateau, 1958).

dopi. Modalidad del juego.

el que la liga. Jugador que hace de burro.

empataco. Modalidad del juego.

enclara. Denominación (Juan de la Plata, 2002)

enclaras. Denominación (Juan de la Plata, 2002)

espolique. Al saltar darle una coz al burro.

fil derecho. Denominación (Diccionario de Autoridades) y El Mentor de la Infancia (1843).

gelimbrú. En el Mide, salto con los pies cruzados puede ser de derecha o de izquierda y según aumentan los pasos aumentan ídem.

juego del paso. Modalidad.

las horas del reloj. Modalidad del juego.

licio. Modalidad del juego.

macho, el. Denominación (Castro Guisasola,1985).

más recalcada. Ver la modalidad mazaculo.

mazaculo. Modalidad del juego.

mazada. Ver la modalidad mazaculo.

mesa (la). Denominación (Castro Guisasola, 1985)

mide. Modalidad del juego.

nache (el). Denominación (Castro Guisasola,1985) 

pasage. Denominación (El Mentor de la Infancia, 1843)

paso sin fin. Modalidad del juego.

paso. Modalidad del juego.

pasos. Modalidad del juego.

pava. Modalidad del juego.

pía maisa. Modalidad del juego.

picada. Ver la modalidad mazaculo.

pida. Modalidad del juego.

pídola. Denominación (Alcalá, 1924).

piola. En Ayamonte y en Jerez, pídola.

quirri. Denominación (Alcalá, 1924).

rucha. Modalidad del juego.

salta-cabrillas. (Denominación (Chateau, 1958).

saltacarnero, el. Denominación (Valserra, 1944).

saltar y parar. Modalidad del juego

salto de la mula, el. Denominación (El Mentor de la Infancia, 1843)

salto del carnero.  Denominación (Chateau, 1958).

san Vicente de la Barquera. Modalidad del juego.

trotamundos. Modalidad del juego.

zapatera. Acción que se puede realizar en El Mide.

Para terminar, como en otras ocasiones, un par de refranes:

A gran salto gran quebranto. En la entrada salto. “Refrán que enseña que la caída es tanto más sensible, cuanto es más elevado el empleo del que se cae.” (DRAE, 1803).

Más vale salto de mata que ruego de buenos. En la entrada salto. “Refrán que enseña que el que ha cometido algún exceso por el que teme que se le ha de castigar, más le aprovecha el ponerse en salvo y escaparse, que no el que pidan por él personas de suposición y autoridad.” (DRAE, 1803).

BIBLIOGRAFÍA

Alcalá Venceslada, A. (1931). Vocabulario andaluz. 1ª edición. Edición facsímil. Universidad de Jaén, coord. Ignacio Ahumada Lara, impreso por la RAE en 1951. Reedición de “El Mundo del Siglo XXI - X aniversario”. Madrid, 1999.

Castro Guisasola, F. (1973). Canciones y juegos de los niños de Almería. Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Almería. 2ª edición actualizada por José Ángel Tapia Garrido. Edit. Cajal, Almería. 1985.

Celaya, G. (1981). La voz de los niños. Edit. Laia s.a. 3ª edición, Barcelona

Chateau, J. (1973). Psicología de los juegos infantiles. Editorial Kapelusz, Buenos Aires.

Diccionario de Autoridades. Real Academia Española.

DRAE, Varias ediciones. Real Academia Española.

El Mentor de la Infancia. Educación Familiar. Periódico de los niños (1843). Juegos de los niños. El salto de la mula, juego llamado también fil derecho. Establecimiento Tipográfico, calle del Sordo núm 11. Madrid.

Franco Martínez, J. (Juan de la Plata, 2002). Juegos y canciones infantiles en el Jerez de mediados del siglo XX. Ediciones Cofran. Jerez de la Frontera.

Matute, E. (1970). El Rey. en Algunos muchachos y otros cuentos. Salvat editores, Barcelona.

Rodríguez Marín, F. (1882). Cantos populares españoles. Sevilla, Reedición Ediciones Atlas, Madrid, 1981. tomo I.

Valserra, F. (1944). Historia del deporte. Colección la historia para todos. Edit. Plus Ultra. Madrid-Barcelona.

 

 

 

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

JUEGOS TRADICIONALES INFANTILES